El Consejo de Derechos Humanos de la Presidencia Rusa solicitó a la ONU y a las organizaciones que velan por los derechos de las personas con discapacidad intelectual, Inclusion International e Inclusion Europe, interceder con el Comité Paralímpico Internacional (CPI), tras prohibir a los deportistas rusos y bielorrusos participar en los Juegos Paralímpicos de Pekín, que se celebran entre el 4 y el 13 de marzo en China.

«Los juegos políticos perjudicaron a las personas ajenas a la política, que superaron el dolor y no faltaron ni a un solo entrenamiento para alcanzar su meta», reza la misiva.

El Consejo también señaló que Rusia está haciendo todo lo posible para cumplir con sus obligaciones en virtud de la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y que siempre toma en cuenta las directivas de los organismos intergubernamentales en este ámbito.

«Hoy, les rogamos que evalúen detenidamente esta situación y que condenen la decisión del Comité Paralímpico Internacional de excluir a las inocentes personas rusas con discapacidad de los JJ.PP. y de discriminarlas por motivos políticos», manifestó la entidad, al dirigirse al Consejo de Derechos Humanos de la ONU. 

«Los Juegos Paralímpicos, que tienen como objetivo unir a la gente y demostrar a todo el mundo lo grande y fuerte que es la voluntad de las personas con discapacidad, se convirtieron, lamentable y paradójicamente, en una fuente de hostilidad y discordia«, agregó la organización.

Este miércoles, el CPI informó que los atletas rusos y bielorrusos podrán participar en los Juegos Paralímpicos de Invierno bajo bandera neutral, aunque los integrantes de estos países no estarán incluidos en el medallero. La entidad deportiva optó por esta decisión tras el operativo militar lanzado por Rusia en Ucrania y expresó su «preocupación y simpatía por los deportistas y ciudadanos ucranianos».

No obstante, al día siguiente, el Comité anunció que suspende a los atletas rusos y bielorrusos del evento debido a que numerosos equipos nacionales amenazaron con retirarse de los Juegos si se permitía competir a los participantes de Rusia.