Niños y jóvenes vestidos de mantudos bailaron a ritmo de músicos filarmónicos durante varias horas, unos por tradición y otros pagando promesas al Santo Patrono de Chinandega, San Pascual Bailón, como parte de las fiestas en su honor.

«Como casa de cultura a través del buen gobierno del Comandante Daniel hemos rescatado esta tradición y el 15 de abril la declararon fiesta folclórica de nuestro municipio», explicó Walter García Moreno, colaborador, conservador y coordinador municipal de las fiestas, quien mencionó que se reparte comida y chicha a la población.

Desde el 2010 se promueve en las escuelas públicas la participación de los niños y niñas para que bailen como mantudos. En este día, a lo largo de la tarde, participaron unas mil personas.

«Son 1 mil 220 niños de 32 centros de estudio y los hemos ubicados en tres bloques y hoy cerramos como casa de cultura nuestras fiestas. Un país sin cultura es como un cuerpo sin alma», añadió Walter.

Las creencias aseguran que para recuperar algo perdido se le tiene que bailar a San Pascual detrás de una puerta.