La llorona, duendes, cadejos, padres sin cabeza, diablos pequeños y grandes, y un sinnúmero de representaciones de antiguas leyendas de miedo y espanto de Nicaragua, salieron la noche de este viernes en la tradicional fiesta de Los Agüizotes, que se celebra anualmente en la ciudad de Masaya con cientos de nicaragüenses disfrazados para aterrorizar.
Durante la procesión fantasmal, que se realiza en el último viernes de octubre y cayendo la noche en la plaza Magdalena del barrio indígena de Monimbó, en Masaya, los residentes iniciaron su jolgorio, provocando el terror por las calles, al son de bandas filarmónicas, en un ambiente de cultura popular.



“Son muchos los años de tradición, el pueblo de Masaya y otros departamentos aledaños se desbordan en esta fiesta, en que somos tradicionalistas que impulsamos nuestra cultura”, manifestó Sonia Gutiérrez, coordinadora del Toro Venado de Monimbó.
Para el pueblo de Masaya los Agüizotes es una de sus más grandes expresiones culturales, donde predominan los atuendos salidos de populares leyendas nicaragüenses que se lucen con máscaras grotescas elaboradas por artesanos locales, en honor al su santo patrono San Jerónimo.



En la espeluznante procesión, también se suman turistas extranjeros, con máscaras de personaje importados o bien se maquillan, para recrear personajes como el de las películas La Monja, Viernes 13, IT, Shrek, La Catrina, entre otros.
El tradicional desfile de los Agüizotes se realiza el último viernes de octubre, y en el mismo se resalta la paz y la seguridad que garantiza la Policía Nacional, el acompañamiento de los bomberos, entre otras instituciones; en esta fiesta tradicional que dinamiza el comercio y promueve el turismo.


