Presidente Ortega insta a los nicaragüenses a no confiarse porque las alimañas golpistas ahí andan  

“Estamos viendo una conducta que pone en riesgo la estabilidad de los pueblos”, por la reinstalación del fascismo en EE.UU y Europa, afirma el Comandante Ortega

Dormir con un ojo abierto y el otro cerrado porque las alimañas (golpistas y terroristas) ahí andan, y así como defendemos la paz, hay que defender la justicia contra los criminales. No hay que confiarse, instó a los nicaragüenses, el Comandante Daniel Ortega, al culminar su discurso en el Acto Solemne de Instalación del Período Legislativo del año 2023.

Lo anterior del presidente Ortega, lo expresó al hacer referencia de que el fascismo en todas sus expresiones se ha reinstalado en Estados Unidos (EE.UU), Europa y en otros países como Brasil, país donde “es increíble lo que está pasando”, con el intento de golpe de estado a que fue objeto el recién asumido gobierno de Lula da Silva, dijo.

El Comandante Ortega, previo a esas afirmaciones, tomó como punto de partida, el golpe de estado que le causaron al presidente Evo Morales. “Ahí el Ejército le dijo a Evo que se fuera. No le quedó más que un paso atrás y luego retornar, ganaron las elecciones”, recordó.

Agregó que ahora la señora (Jeanine Áñez), que asumió ilegalmente el poder en Bolivia esta presa, y que en una situación similar esta una de las fichas del imperio, “el de Santa Cruz (Luis Fernando Camacho). Indicó que después del golpe no había sido detenido y que siguió organizando un nuevo golpe y al gobierno no le quedó más que aplicar ley. “Esas son las prácticas terroristas de los que dicen ser demócratas”, subrayó el mandatario.

En el caso de Perú, lo calificó como “un problema de clases”, pues el presiente Pedro Castillo viene de un sector popular. Ilustró que Castillo sacrificó diputados, ministros, para buscar la gobernabilidad pero lo derrocaron y lo echaron preso. “Dónde están los organismos de derechos humanos que maneja Europa, EE.UU, ahí no existen”, acotó.

Al hacer referencia de los acontecimientos en Brasil, dijo que es increíble lo que sucedió. Que fue igual al mismo esquema que se usó en el asalto al Capitolio en EE.UU., y que igual se lanzaron los seguidores del expresidente Jair Bolsonaro (contra las instituciones públicas), que Bolsonaro es un “fascista”, “racista” y odia a las mujeres.

El presidente Ortega, sostuvo que el expresidente se fue a Miami porque él sabe que ahí está el “hervidero” donde vive conspirando, “la gusanera” envenenada.

Reiteró que las mismas imágenes, cuando los golpistas terroristas entraron en el Congreso de EE.UU., son las mismas en Brasil. Y la policía no hizo nada, hubo desastres.

Y quién se iba imaginar eso en Brasil con un recién nombrado presidente, cuestionó, respondiendo que esto tiene que ver porque el fascismo se está reinstalando en EE.UU., Europa y ahora lo vemos en Brasil, en Bolivia. Que es un fascismo que no quiere reconocer el triunfo de gobiernos progresistas.

“Estamos viendo una conducta que pone en riesgo la estabilidad de los pueblos”, subrayó el mandatario Ortega, y que por ello, “aunque las aguas estén mansas líbranos Señor. No hay que confiarse. No podemos confiarnos porque los terroristas siempre anda conspirando”, con financiamiento hasta de Europa.

En el caso de Nicaragua, apuntó que los criminales que participaron en el fallido golpe de estado del 2018, se capturaron y ahora hay campañas para que se liberen a “los criminales”. En EE.UU., hay más de mil detenidos por los sucesos del Capitolio, en Brasil y Bolivia hay detenidos, ¿van a pedir su libertad? Preguntó, pero que en el caso de EE.UU, seguro le va a caer el peso de la ley.

El Comandante Ortega, remembró que después del triunfo la revolución el 19 de julio de 1979, los destacamentos guerrilleros no salieron a perseguir a los diputados de la época. Y que tras la derrota en 1990, se recocieron los resultados a favor de doña Violeta Barrios.

Y que solo cuando no se respetaron los logros de la revolución, es que hubo protestas, que dejaron muertos pero que nunca “se nos ocurrió dar un golpe de estado. Tomarse el Congreso era fácil, la presidencia, teníamos una fuerza desplegada y no se nos ocurrió”, reiteró.

Ilustró que el ingiero Antonio Lacayo (qepd), incluso le llegó entregar la llave (la presidencia) porque doña Violeta se la enviaba, y que él dijo que no, que había que seguir negociando. “Era fácil pero no se ocurrió arrebatar el poder, incluso no era necesario el Ejército o la Policía (para ese fin), porque había fuerza del pueblo”.

Luego refirió que le entregaron la presidencia a Alemán (Arnoldo), y tampoco se ocurrió desconocer los resultados, y terminó su periodo negociando. Con Enrique Bolaños (qepd), en la presidencia, comentó que aunque le llamaron terroristas, esos “terroristas respetaron los resultados”, que los nuestros diputados sandinistas fueron la balanza  entre las contracciones de Bolaños y Alemán.

Resaltó que incluso en disputa, nunca se les ocurrió quitar el poder, y que se prefirió la cuarta oportunidad de acceder a la presidencia por los votos, y que a pesar del refrán que “a la cuarta ni los bueyes”, como el que decide es el pueblo se produjo el milagro y se ganaron las elecciones de 2007.

Ya al frente del ejecutivo, el Comandante Ortega, recordó que se conversó y se negoció con todos los actores de la sociedad para por la reconciliación y que se hizo una gran alianza, pero los buenos resultados puso más “rabiosos a los EE.UU”, originado el intento de golpe de estado en 2018, que después incluso se siguió conspirando y financiando.

“Ni cadena perpetua pueden sanar el daño causado a los nicaragüenses a la economía”, recalcó, indicando que esas acciones criminales dejaron más de 300 muertos.

Añadió que tras derrotar al golpismo y recuperar la paz, se inició a retomar todo lo positivo que se venía haciendo por la población nicaragüense y que “realmente es un milagro” lo que se venía haciendo, lo que se sigue haciendo porque siendo un país pequeño con pocos recursos, se está haciendo y se seguirá haciendo.