Buenos Aires (Sputnik) — El uso de barbijo o mascarilla en ambientes cerrados dentro de la ciudad de Buenos Aires dejó de ser obligatorio desde este 16 de junio, informó el ministro de Salud del Gobierno de la capital, Fernán Quirós.

«Hemos pasado de la condición de obligatorio a recomendado en los interiores», señaló Quirós en una rueda de prensa.

A las puertas del invierno austral, la ciudad de Buenos Aires registra más de 14 días con un descenso sistemático de los casos del COVID-19, de manera que «esta cuarta ola de (la variante) Ómicron está completando su recorrido», afirmó el funcionario.

El Ministerio de Salud, no obstante, recomienda el uso del también llamado tapabocas en los interiores mal ventilados.

En la ciudad, donde viven más de tres millones de personas, 2,9 millones de habitantes (el 97% de la población) comenzó su esquema de vacunación, mientras que 2,8 millones se aplicaron la segunda dosis (el 95%).

Además, 2,1 millones de personas recibieron un primer refuerzo, mientras que 710.417 personas se inyectaron una cuarta dosis.

«El grado de vacunación es altísimo», lo que permite que haya «pocas situaciones de gravedad», resumió el ministro.

A nivel nacional, se registraron 36.835 infecciones en la última semana y 21 muertes de pacientes que tenían el COVID-19, lo que certifica un descenso en el ritmo de contagios a un mes de que comenzara la cuarta ola.

Argentina acumula así 9,3 millones de casos de coronavirus y 128.994 fallecimientos de personas que atravesaron esta enfermedad.