«De ninguna manera queremos detener el apoyo a ningún país«, se vio obligado a dejar sentado el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), en un comunicado oficial, tras las declaraciones de la presidenta ejecutiva, Ana Gisela Sánchez, donde hizo referencia a que El Salvador y Nicaragua habían llegado a un límite de los fondos que entrega el banco.

La funcionaria costarricense, afirmó en una plataforma de medios que, en el pasado y actualmente cuestionan la gestion del presidente anterior, Dante Mossi, que ambos países habían llegado a «un límite» y sobrepasado ese límite» de créditos, por lo que dejó entrever que ya no tendrían más acceso a recursos.

«Con respecto a las noticias que han circulado en los últimos días, desde el BCIE queremos aclarar muy enfáticamente que nuestro objetivo como banco de desarrollo es servir a todos los países miembros en implementar proyectos que transformen positivamente la vida de los centroamericanos», indicó la nota de la entidad publicada este sábado en su página web y redes sociales.

Ante lo expresado por Ana Gisela, el gobernador de Nicaragua, Iván Acosta, la «instó a no convertir al Banco en una campo de batalla política». Ademas que Nicaragua, es un país miembro fundador socio de esta entidad, y como tal ejerce su derecho a solicitar financiamiento para sus programas de desarrollo conforme los requisitos y políticas establecidas.

«De ninguna manera queremos detener el apoyo a ningún país. Más bien al contrario, nuestro objetivo es apoyar más en la implementación de soluciones integrales que reduzcan la pobreza, que promuevan la equidad, que contribuyan al cuidado del medio ambiente, que promuevan el desarrollo de infraestructura, que aumenten la competitividad y que mejoren la calidad de vida de las personas«, afirmó enfáticamente el BCIE en su nota.

Se agregó a modo de justificar las declaraciones de la tica, Ana Gisela, que lo que quisieron como entidad bancaria era «expresar es que el BCIE puede servir mejor a todos los países si aprovecha la oportunidad de elevar su participación en aquellos países con más espacio de crecimiento en nuestra cartera. Esto es positivo porque apoyaría a atender los principales desafíos para el desarrollo y la integración de los centroamericanos». 

Asimismo el BCIE trató de explicar que lo antetiotr, es lo deseable porque les permitirá diversificar la cartera y de esta forma abrir más espacio de financiamiento a todos los países.

«Integralmente, esto nos ayuda a fortalecer nuestro perfil financiero y por ende cumplir con nuestra misión de apoyar el desarrollo sostenible de Centroamérica«, argumentó el banco.

Cierran en su nota aclaratoria, que son «muy enfáticos» en su mayor objetivo que «es ser el banco de desarrollo más relevante en Centroamérica y promover la prosperidad en la región«.

Nicaragua en su nota enviada la presidenta ejecutiva del BCIE, Ana Gisela Sánchez, consideró que «sus declaraciones no contribuyen a la gestión desarrollada por el Banco y al espíritu de integración centroamericana. Nicaragua, es uno de los países que vela para que cumpla con los más altos estándar en la misión y visión de esta entidad financiera como le corresponde en su calidad de miembro socio fundador. Inclusive nuestro país, ha contribuido de manera activa a la consecución de socios extra regionales con respeto soberano».